Esta fotografía muestra el tendedero de mi casa. No os dejéis engañar por el pacífico y tranquilo aspecto de la zona, pues en este sitio se viven tensiones y conflictos territoriales similares a los de Oriente Medio.Os pondré en situación con este dibujo tan gráfico:
El tendal de mi casa consta de 5 cuerdas y es compartido con el de mi vecina de en frente. Así que lo lógico sería que cada uno utilizáramos dos cuerdas y repartiéramos la tercera cuerda por la mitad o bien pudiese ser usada por ambos según el tamaño de la colada. Sin embargo, no sé qué tipo de pacto implícito ha hecho que ella use las 3 cuerdas de la izquierda y nosotros las 2 de la derecha. Tampoco creo que que conste en el registro de la propiedad, pero hasta ahora me había conformado con ello. Y repito "hasta AHORA".Porque el otro día puse una lavadora inmensa y no había forma de que cupiera todo en las dos cuerdas de la izquierda, así que coloqué dos simples calzconcillos en la cuerda de en medio pensando que no habría problema alguno. No obstamte en ese mismo momento mi vecina se asomó a la ventana para tender su ropa y me dijo:
"-Hola, vas a tener que quitar esos dos calzconcillos de ahí porque la cuera de en medio es mía.-"
"-Verá, es que no me caben en mis dos cuerdas, y la verdad es que tampoco entiendo porque esa cuerda es suya. Quiero decir, si hay 5 cuerdas a repartir entre dos, se supone que cada uno podemos optar a usar dos cuerdas y media, porque la mitad de 5 es 2,5, ¿no?-"
"-Sí,pero suposiciones al margen esa cuerda es mía, porque ya lo hablé con tu padre y se acordó así.-"
Y así, discutiendo, he caído en lo jodidamente asqueroso que es el ser humano. Y en como hay conflictos que jamás tendrán solución, como el palestino-israelí, o todas las guerras en general, que a gran escala también son causadas por un problema de "gallumbos y cuerdas de más y de menos", pero a lo bestia, claro.
Al final he optado por quitar los calzoncillos y no discutir. Pensaréis que esa es la pachorra típica que un día pudo llevar al mundo cerca del desastre "-Señor Presidente, tenemos noticias del Viejo Continente. Nos informan de que los alemanes han entrado en Polonia. Quizás tendríamos que intervenir-"
"-¿¿Polonia?? ¿¿Hay un país que se llama así?? Estará de coña, ¿no? Deja que se maten entre ellos. Los europeos y sus viejas costumbres, son unos salvajes. Y además, su guerra nunca llegará a nuestras costas...-"
No digo que el haber dejado mis calzoncillos empapados ahí colgados hubiese causado la Tercera Guerra Mundial, vale. Pero sí la Primera Guerra Vecinal.
Porque si yo dejo los calzoncillos, a lo mejor ella los descuelga y los tira. Entonces a mí se me va la pinza, y con lo retorcido que soy, se me ocurre dejar durante 3 días un bote de mayonesa abierto encima del radiador y untar su ropa con la plasta mohosa resultante, o directamente me meo encima de sus camisones, y entonces ella etc, etc, etc,... Acción - Reacción.
El caso es que si yo sólo pedía 30 cm de cuerda para colgar dos putos calzoncillos y no se me han concedido, ¿¿Cómo pretendemos que se solucionen problemas como el de la Franja de Gaza con 50 kilómetros de frontera con Israel en conflicto??
Porque yo puedo meter mis calzoncillos en el horno y ya está todo arreglado ¿¿pero qué hacer con todos los palestinos despojados de sus tierras?? Apuesto a que en el parlamento israelí se ha analizado una solución similar a la que yo propongo para mis gallumbos, y dicho sea de paso, su política exterior ya consiste, así a grandes rasgos, en freír gente...Pero es todo tan complicado...
Yo sólo veo dos soluciones para conseguir la Paz mundial:
1) LA EXTINCIÓN DE LA RAZA HUMANA
ó 2) DEJAR DE UTILIZAR ROPA INTERIOR
¿¿La más viable?? Una vez me tocó ir de comando (sin calzoncillos) y con vaqueros por un despiste en el vestuario de natación, y es lo más incómodo y doloroso del mundo, así que por mí nos vamos todos a tomar por el culo y tan contentos, ¿va?
